jueves, 25 de febrero de 2016

¿No eres fan de las ensaladas? Guia completa para cocinar vegetales

Hay una gran cantidad de personas que no le gustan los vegetales o no saben como prepararlos. Relacionan vegetales con ensalada y ya. Pero eso no es así. Existen una gran cantidad de formas de preparar los vegetales en una gran variedad de recetas, y el internet nos da tambien muchisimas ideas creativas, incluso para comer aquellas que no nos agradan tanto.

En este sentido, existen métodos que pueden contribuir a preservar los nutrientes mucho mejor que otros. Los mejores métodos para preservar los nutrientes son:

-Al vapor: es una forma de cocción que preserva muchísimo los nutrientes. Lo ideal es no colocarle sal, sino al final cuando estén listos; pues pueden perder agua y quedar más duras.

-Asadas al horno: Se precalienta el horno a 200º y mientras lavamos, secamos y pincelamos con aceite las hortalizas procurando asarlas enteras, sin cortar. Si se trata de cebollas o papas, después de pincelarlas, las envolvemos una por una en papel de aluminio u otro papel apto para horno. Así no se resecan y quedan muy jugosas. El tiempo de horneado depende de la hortaliza. Pinchamos con una aguja para cerciorarnos de que ya están blandas. Es un método super práctico, pues nos ahorra tiempo.

- A la plancha: Lavamos, secamos y partimos las hortalizas en ruedas o a la largo.
Pincelamos la plancha con aceite y pincelamos también las hortalizas. Un buen sistema es poner aceite en un plato e ir pasando los trozos por allí antes de colocarlos en la plancha.
Se hacen a temperatura moderada y se les da la vuelta para que queden doradas por ambos lados.

-Confitado o caramelizado: Confitar una hortaliza consiste en cocinarla en aceite a fuego mínimo.  El confitado mismo es el que carameliza los azúcares de la propia hortaliza, de ahí que a la cebolla confitada, se la llame también cebolla caramelizada. 
Los alimentos confitados son saludables aunque vayan cocinados en aceite pues ésta no llega a hervir por lo que no se dan los procesos químicos que alteran el aceite.



-Salteado: Es una cocción en aceite a fuego vivo, para que la hortaliza quede dorada pero sin perder sus jugos. Movemos la sartén o el recipiente con frecuencia para que los pedazos se hagan bien por todos los lados. El recipiente ideal para saltear verduras (y cualquier alimento) es el wok.

-Sofrito: Igual que salteadas pero a fuego más bajo de forma que se cocinan más lentamente. Suele usarse una mínima cantidad de aceite.

-Al grill o a la parrilla: Similar que a la plancha, pero se prepara en una parrillera ya sea eléctrica o al carbón. 

-Estofado: Se trata de cocinarlas en un recipiente cerrado, a fuego lento con un poquito de aceite de forma que se cocinan en su propio jugo. El aceite se pone en crudo, se introducen las hortalizas, se tapa y se deja a fuego lento hasta que están tiernas. Permite conservar muchísimo los nutrientes de las verduras que quedan en el caldo. 

-En purés: Para hacer un puré las cocemos en un caldo de carne o pescado y luego las trituramos. 

-En sopas o cremas: Para hacer una crema, las cocemos con poca agua, y luego se licua. Si se desea espesar se puede agregar papa u otro tuberculo o chayota. 



Recuerda, que cuanto más simple sea la forma en que cocinamos las verduras (y todos los alimentos), mejor conservarán sus propiedades. Por eso, consumir los vegetales crudos suele ser la mejor opción para conservar los nutrientes. Pero, si no te gustan crudos o no eres fan de las ensaladas, ya tienes muchas ideas para cocinar los vegetales y hortalizas de formas muy variadas. ¡No hay excusas! Y tu, ¿como prefieres cocinar tus verduras? Cuentame en los comentarios tu método o receta favorito. 

    Escrito por la Lic. Rogledys López, Licenciada en Nutrición y Dietética, especialista en Fitoterapia, con una amplia trayectoria en el área de atención nutricional normal y terapéutica de niños y adultos. Promotora de la educación nutricional como una herramienta de prevención de enfermedades crónicas.  

Fuente: http://cocinasanayfacil-ruqui.blogspot.com/2014/01/formas-de-cocinar-verduras-y-hortalizas.html




lunes, 22 de febrero de 2016

Ganadores del Concurso #masnutricion2k

Felicitaciones a 

@gaviriaedna

@naileth0708

han ganado una asesoría nutricional online.


Los ganadores fueron elegidos a traves de la pagina web: https://www.randompicker.com

Si deseas verificar la transparencia del proceso  puedes entrar a este link https://www.randompicker.com/protocol/284851x84128   y ver toda la informacion relacionada. 

Gracias a todos por participar, y atentos ya que pronto se vienen mas consursos!


martes, 16 de febrero de 2016

Cambios en el estilo de vida para bajar de peso: la importancia de la atención integral en el paciente obeso.

Cuando se desea perder peso, no se trata solo de comer o no ciertos alimentos y hacer una determinada cantidad de ejercicio. Existen factores relacionados, al estilo de vida de la persona, que pueden tener una influencia enorme en la persona y que pueden impulsar o estancar su progreso.


De allí, la importancia de que el nutricionista - dietista, analice el comportamiento de su paciente, para identificar eventos, pensamientos, antecedentes, prácticas y conductas que estén relacionados con el consumo de alimentos, el ejercicio o los hábitos de pensamientos apropiados e inapropiados y que puedan sabotear los esfuerzos del paciente por bajar de peso.

Para contribuir a estos cambios, se aplican varias estrategias. El uso de una u otra, dependerá del análisis de cada caso particular. Por ejemplo, la autovigilancia, a través de registros diarios del consumo de alimentos así como horario, ideas y sentimientos que acompañan a esos alimentos; ayudan a identificar las circunstancias físicas y emocionales en las cuales ocurre el consumo de determinados alimentos. Además, puede proporcionar una retroalimentación sobre el progreso y cómo prevenir recaídas. Acá se pueden llevar diarios de alimentos en físico o el uso de aplicaciones que ayudan a llevar un control de lo que se ingiere.

Fuente: www2.esmas.com


También, se le dan al paciente herramientas para la resolución de problemas, enfocados principalmente a situaciones donde se puede ver afectado el proceso de pérdida de peso, como vacaciones, festividades (navidad, cumpleaños, etc.), salidas con amigos, etc.
Por otro lado, se le enseña al paciente a controlar los estímulos que pudieran llevarlo a comer de más, pero también a comer con más lentitud para percibir los indicios de saciedad y reducir el consumo de alimentos.

Y sobre todo, se trabaja con el paciente la reestructuración cognitiva, donde se ayuda a la persona, a identificar y corregir las ideas erróneas y negativas que pueden minar sus esfuerzos por bajar de peso. La idea es que ante una recaída o por la autocrítica excesiva,  no se lleve a un abandono total del esfuerzo, sino, más bien a hacer frente a estos incidente de manera más constructiva.

Fuente: www.nutriyachay.com


De modo que, en programas de pérdida de peso, no es solo colocar una dieta, hacer ejercicio y ya. Existen muchos factores asociados al medio ambiente y a las emociones que inciden directamente en el fracaso o éxito de un proceso de adelgazamiento. El profesional de la nutrición está capacitado para atender al paciente de forma integral: Bio-Psico-Social y así ayudarlo a alcanzar con éxito un peso saludable y a hacer de la alimentación nutritiva y el ejercicio regular un estilo de vida.

     Escrito por la Lic. Rogledys López, Licenciada en Nutrición y Dietética, especialista en Fitoterapia, con una amplia trayectoria en el área de atención nutricional normal y terapéutica de niños y adultos. Promotora de la educación nutricional como una herramienta de prevención de enfermedades crónicas.

Fuente: Mahan L, Escott - Stump S. (2000) Nutrición y Dietoterapia de Krauss. Décima edición. Páginas 547 a 549  Philadelphia, USA.


jueves, 4 de febrero de 2016

¡Prevenir el cáncer es mejor que lamentarlo!

El cáncer puede considerarse una enfermedad de las células del organismo. Su desarrollo implica el daño al ADN celular, el cual se acumula con el tiempo. Cuando estas células evaden los mecanismos de defensa del cuerpo se establece una neoplasia. Existen diversos tipos de tumores, los cuales se clasifican en base a su tejido de origen, sus propiedades de crecimiento y su capacidad para invadir otros tejidos. 

Aunque se desconocen los mecanismos exactos, la nutrición puede modificar el proceso carcinógeno en cualquier etapa, sea en el metabolismo del cáncer, las defensas del huésped, la diferenciación celular o el crecimiento del tumor, Y a su vez, la nutrición del paciente, se ve adversamente afectada tanto por el tumor como por los efectos adversos de el tratamiento médico aplicado, los cuales deben ser atendidos con un equipo multidisciplinario, donde el nutricionista - dietista clínico juega un papel predominante.

De allí, la importancia de prevenir esta enfermedad, diversos institutos y organizaciones a nivel mundial, enfocadas en la lucha contra el cáncer, han hecho recomendaciones para las buenas prácticas de alimentación y estilo de vida que contribuyen a prevenir el cáncer. Estas incluyen aspectos de nuestro diario vivir sobre los que podemos tener pleno control y que dependerá de nosotros tomar buenas decisiones que nos lleven a prevenir y no a lamentar.
Entre las recomendaciones más importantes tenemos:


- Aumentar el consumo de alimentos provenientes de fuentes vegetales (especialmente verduras crucíferas como brócoli, coliflor, coles de Bruselas), verduras frondosas verdes, lechugas de color verde intenso, zanahorias y fruta cruda y fresca.  Esto se debe, a que las frutas y verduras, constituyen una buena fuente de fibra, vitaminas, minerales y otras sustancias bioactivas. Las frutas en particular, confieren una protección importante contra canceres de esófago, cavidad oral y laringe. Además, existen pruebas solidas, de un efecto protector frente a cáncer de páncreas y estomago, colorrectal, vesical, de cuello uterino, ovario y endometrio.

La frutas y verduras frescas y orgánicas, poseen un gran número de agentes anticarcinogénicos como carotenoides, vitamina C y E, selenio y fibra alimentaria. Por otro lado, poseen  fitoquímicos como licopenos, flavonoides, fenoles, fitatos, inhibidores de proteasa, esteroles de plantas, compuestos de alio, lignanos, entre otros. Estos fitoquimicos son componentes químicos naturales, biológicamente activos que actúan como sistemas de defensa naturales. Como protección contra el cáncer, estas sustancias derivadas de las plantas pueden eliminar toxinas, carcinógenos y mutagenos, además, hacen las veces de agentes bloqueadores o supresores para atenuar el riesgo de cáncer.

- Limitar el consumo de alimentos ricos en grasa, en especial de fuentes animales.

-Ser físicamente activo, 30 minutos de actividad física regular, por lo menos 3 veces a la semana son una excelente forma de iniciar.

- Alcanzar y mantener un peso corporal saludable.



-Limitar el consumo de bebidas alcohólicas

-Eliminar el consumo de tabaco, el cual, es el factor de riesgo más importante y la causa del 22% de las muertes mundiales por cáncer y el 71% por cáncer de pulmón.

Así pues, está cada vez más claro, que existe una relación estrecha entre la alimentación y un estilo de vida saludable (ser físicamente activo, limitar el consumo de bebidas alcohólicas y no fumar) con ser saludables y la prevención, no solo del cáncer sino de muchas otras enfermedades. El reto, por un lado. es para los pacientes, para que tomen conciencia de la importancia de estos cambios y no posponerlos, sino actuar ya. Y por otro lado, como profesionales de la salud, debemos continuar diseñando programas de alimentación y promoción de estilos de vida saludables, que contribuyan a eliminar las barreras que impide a la personas realizar estos cambios y por otro lado, educar sobre la relación estrecha entre la alimentación y la salud. Como lo dijo Hipócrates:" Que tu alimento sea tu medicina "

Escrito por la Licenciada en Nutrición y Dietética Rogledys Lopez, especialista en fitoterapia.